martes, 25 de octubre de 2016

2-El desprecio hacia las personas mayores

Esto deviene de varias confusiones. Citaré sólo algunas:
Nosotros mismos seremos mayores eventualmente: viviendo en una época que nos hará sentir inadaptados. No estoy exagerando... será así. Si tenemos la suerte de llegar, sentiremos que nos mueven el tiempo y el espacio en que hemos nacido. Que nos mueven el piso, año tras año.
Nosotros mismos "mamamos" esos valores: sí, esos de los que renegamos creyéndonos además superiores. Pues implícitamente nos creemos superiores en realidad. A padres y abuelos cuyas familias quizás sí pudieron mantener. Mejores a quiénes usualmente miramos luego como infinitamente mejores padres/ abuelos que nosotros. Esos valores "antiguos"... les sirvieron.
Vivíamos más tranquilos antes: ya sea por el grado notablemente menor de superpoblación, como por los valores llamados "tradicionales" antes vivíamos mejor. Jugábamos en la calle, y cosas impensadas para jóvenes actuales. Jóvenes que dicho sea de paso están en constante riesgo. Las "redes sociales" que parecen paradójicamente más bien lo opuesto de eso. En estas "redes" se vive.
No coinciden "antiguo" y "viejo": pues antiguo es sinónimo de sobrevivir, no de envejecer. Muchas modas actuales pasajeras son viejas al nacer; lo antiguo es lo opuesto. Sobrevivió a "la prueba del tiempo", destacando su intrínseco valor.  Los jóvenes actuales, especialmente aquellos que desprecian manifiestamente al maduro, ignoran esto. Por nacer "después", creen tener intrínseco valor.

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