lunes, 24 de octubre de 2016

1-) Las guerras sucias

Todas las guerras son sucias... al menos esa es mi opinión. En todas quiénes ingresan en ella piensan que pueden ganar, y eso es sucio. Y la ventaja que termina por imponerse, es a menudo una trampa impensada por el otro. Es decir una suciedad impensada.

Pero hay dos grandes suciedades que hoy definen a toda las guerras presentes en el mundo. El "pretexto" del más fuerte, y el "terrorismo" de quien no lo puede enfrentar. Veámoslas en cierto detalle:
El pretexto para la invasión: "Irak" es un claro ejemplo de esta particular suciedad. Fue invadida a principios de este siglo so pretexto de que en ella habían "armas nucleares". Tan obvio fue para los mismos iraquíes, que no dudaron en quemar todos los pozos petroleros en su final huida.
El terrorismo del más débil: por no poder enfrentar al fuerte, pero sí dañarlo. Sí emboscarlo y dañarlo de a poquito, jugando al "desgaste". Jugando a "la opinión pública", incluso televisando matanzas por televisión. Un juego de "el gato y el ratón" muy desgastante y cruel.

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